martes, 18 de marzo de 2008

Otro Mexicano, no tan malo... ni tan bueno


En una agradable noche de Lunes Santo, dispuesto a encender el asador para preparar un asado para mi esposa y yo, tuve la curiosidad de fumarme un A. Turrent Reserva de la Casa, 5.5 x 50, Torpedo, adquirido en la Tienda Te Amo de San Pedro, Nuevo León. Confieso que no esperaba gran cosa de este puro producido en las vegas de San Andrés Tuxtla, Veracruz, pero quizás mis limitadas expectativas produjeron al fin de cuentas una memorable - aunque muy breve - ocasión de disfrute.
Lo primero que me atrajo fue su aroma y suavidad en la capa; antes de encenderlo brotaron aromas casi florales, sin ser demasiado evidentes. Fue de encedido muy rápido y de combustión como si fuera un bólido de Fórmula 1, un torpedo de estas dimensiones jamás me había durado menos de 45 minutos. Este Reserva de la Casa pasó a mejor vida apenas a los 27 minutos de haberlo puesto bajo la llama, y eso que estaba al mismo tiempo atendiendo el carbón en el asador, lo mismo que el Jack Daniels sobre hielo que paladée.
Por cuanto al puro se refiere, se trataba de un cigarro de buena construcción, excelente aroma y sabor. Aunque de cuerpo muy suave para mi gusto, poseía aromas muy delicados en el paladar, principalmente a cuero y un poco de anís. Lástima que haya sido tan corto en duración porque confieso que estaba disfrutándolo, especialmente porque hacía tiempo que no estaba an contento con un puro de cuerpo suave o medio.
En fin, un Mexicano suave, aromático y delicioso. Ni muy bueno, ni tan malo.

No hay comentarios: